sumario
arte
contacta
 


El arte islámico, la multiplicidad de lo Uno (2ª parte)
Maris Stella Morales Soto
27/04/2012



1. Los arabescos, de la unidad a la multiplicidad:

Así como en el buddhismo encontramos la idea de Shunyata o Vacío - (ch.) Mu (jap.)- el espacio en el que todo se haya indiferenciado, también llamado WúMíng ( [Nota 1]), hay dos conceptos que podemos relacionar y que son permanentes en la historia del islam y por extensión en sus diversas manifestaciones artísticas: Tawhid y Wahdat-ul-wuyud [Nota 2].

   

En el islam ambos señalan hacia la mirada externa que es capaz de discernir que detrás de la multiplicidad de las cosas desplegada a nuestra vista, hay un hilo conductor, un principio de unidad y armonía. Todas estas cosas solas no tienen vida por si mismas, no son realidades absolutas sino relativas.

Ambas ideas son las que dan el sentido de la unidad, expresado en el arte (fundamentalmente por la geometría).

Esta dualidad o mejor dicho, unidad diádica [Nota 3] : unidad-multiplicidad tiene como su mejor ejemplo artístico el arabesco en el cual encontramos dos puntos básicos:

1. La unidad

2. Un componente representando la nada: lo abstracto, la fugacidad o el cambio constante dando ritmo y movimiento.

2. La imagen en el arte islámico:

La importancia, como ya dijimos, de la lengua árabe en la estética islámica, era suficiente para embellecer textos literarios, históricos o religiosos (ya hemos visto el gran desarrollo de la caligrafía). La Unidad, Al•lah o el Tawhid no necesitaban de imágenes [Nota 4]; ; siendo una idea que comprendía el todo no podía ser representada ni confundida o remplazada por un elemento diferenciado y separado del conjunto de la obra artística. Por otro lado contaban con los arabescos en su despliegue rítmico y geométrico. Así pues, contrariamente a lo que muchos piensan, la imagen en el islam no se encuentra prohibida en el mensaje coránico, en todo caso lo será por decisión personal. De hecho, la imagen ha sido utilizada por musulmanes a lo largo de la historia en la periferia de la cuna del islam. Así tenemos por ejemplo las ilustraciones del profeta Muhammad en los manuscritos mongoles desde la Dinastía Ilkhanida (siglo XIII-XIV) hasta inicios del periodo Otomano (siglo XVI) o las miniaturas realizadas en el contexto geográfico de la antigua Persia caracterizándose por la abstracción de la imagen (donde podemos encontrar la idea de que nada es real por sí solo) apoyada por la técnica pictórica china y por su precisa descripción de la arquitectura enmarcando los personajes en una graduación de jerarquías unificando simbolismo arquitectónico (como veremos más adelante) y jerárquico en la relación Cielo-Tierra.

Básicamente su función consistía en reproducir y crear representaciones visuales de los poemas y gestas de la época o con fines pedagógicos (ilustrar la Sira o biografía del profeta Muhammad).

Destacaremos las escuelas de miniaturas persas, de las cuales, las más relevantes fueron:



   

Escuela de Shiraz:

• Entre los siglos XIII-XIV
• Capital de Fars
• Tema principal: el Shahnameh [Nota 5]
• Composición del Estilo
        • Simetría
        • Líneas seguras
        • Estática


Escuela deTabriz:

• Sobre el siglo XIII
• Influencias armenio-bizantinas y China.
• Gran migración de pintores, intercambio de estilos
• Composición:
      • Gran empleo del espacio
      • Introducción de la         arquitectura y el paisaje
      • Figuras vivas y naturales


Escuela de Herat:

• Primera mitad siglo XV
• Composición:
     • Mayor detalle
     • Estructura rítmica        compleja
     • Mayor vivacidad
     • Mayor importancia        al retrato


Posterior desarrollo:

• Declive y pérdida de la calidad
• Siglo XVII:
         • Influencia de los retratos            europeos
         • Escenas de amor
• Siglo XVIII:
         • Aves


3. La arquitectura:

La arquitectura en el islam es, por un lado el soporte de la palabra recitada (tayuid [Nota 6]) y por otro el soporte de la palabra escrita.

¿Qué han hecho los arquitectos para propiciarlo? Han usado y recreado el arco y la cúpula. La línea curva es una caja de resonancias: la línea curva es divina y la recta es humana.

  

El concepto del pabellón con cúpula remonta a antiguo y es central en la tradición de la arquitectura persa Sasánida preislámica. Su forma más simple es la de una sala con cuatro arcos formando las paredes que remontan hacia la cúpula (chahartaq, en persa 'cuatro arcos o esquinas'). La simbología básica tras esta estructura viene representada de la siguiente forma:

• La cúpula es el principio activo: cielo
• El octógono es el tránsito o Mundo Imaginal [Nota 7], es el encuentro entre lo cuadrado sutilizado y el círculo encarnado.
• El cuadrado: la tierra

La llegada del islam dio a este viejo concepto un simbolismo mayor. El diseño de la mezquita persa con su patio central rodeado por cuatro iwan, opuesto a la mezquita hipóstila árabe tradicional (donde había un iwan principal de cara a los otros tres) es prueba de ello.

   Plano del Taj Mahal de Agra (India)  Taj Mahal de Agra (India)

Otro elemento de gran simbolismo en la arquitectura islámica será el jardín persa (los orígenes de la palabra persa en lengua asvésticapairi-daeza posteriormente se incorporarán en la cultura judeo-cristiana como el ‘paraíso’).

El estilo persa intenta, frecuentemente, integrar las partes ‘interiores’ con las partes ‘exteriores’ (lo que se realiza, a menudo, a través de un jardín que rodea el patio interior).

El objetivo de este tipo de jardín era el de procurar la tranquilidad tanto espiritual como recreativa siendo introducido por Babur [Nota 8] en la India. El jardín persa (jardín cuarteado) será adaptado por el islam, representando en la estética islámica el Yanna o Paraíso relatado en el mensaje coránico. Ejemplos de esta estructura la podemos encontrar en innumerables parques, palacios y en ciudades bajo el nombre técnico de chaharbagh, compuesto por una división cuatripartita de jardines y ríos y cuya planta reflejará la imagen del pabellón de cuatro arcos. Uno de sus mejores ejemplos es el Taj Mahal de Agra (India).



Nota 1: Literalmente sin nombre, es empleada sobre todo en los textos vinculados al taoísmo filosófico para designar un estado anterior a la formación de los seres y la imposición de apelativos sobre ellos. A menudo se utiliza para referirse al propio curso o Dao… (Elogio de la anarquía, por dos excéntricos chinos del siglo III, Ed. Pepitas de calabaza, p. 48.

Nota 2: Unicidad y Unidad de la Existencia respectivamente, ver artículo anterior, El arte islámico: unidad en la multiplicidad.

Nota 3: Díada: pareja de dos seres o cosas estrecha y especialmente vinculados entre sí.

Nota 4: Si bien la letra Alif(Ç) será empleada para representar esta idea de unicidad.

Nota 5: La Épica de los Reyes, obra poética escrita por el persa Ferdowsi (siglo XI), epopeya nacional.

Nota 6: Ver artículo precedente El arte islámico: unidad en la multiplicidad.

Nota 7: Mundus Imaginalis en palabras de Henri Corbin 'un intermundo entre lo sensible y lo inteligible, intermundo sin el cual la articulación entre lo sensible y lo inteligible queda íntegramente bloqueada' en Cuerpo Espiritual y Tierra Celeste, Ed. Siruela.

Nota 8: Fundador de la Dinastía Mogol, siglos XV-XVI en India.


_______________________


__________________________

DATOS DE LA AUTORA:

Maris Stella Morales (Lima, 1961) Diplomada en Naturopatía y M.T.C., cursa actualmente el Master de Estudios de Asia Oriental especializándose en Arte y Pensamiento y en la comprensión de ambos como medio para la contemplación y meditación. Aprende caligrafía china con la calígrafa Tere Vila Matas, discípula del maestro coreano Ung-No Lee y se inicia en el arte de la encuadernación en Paris con la encuadernadora Catherine Chauvel continuando en Barcelona con Begoña Cabero. También es alumna del maestro de Shakuhachi Horacio Curti. Ha colaborado con la Asoc. Unesco para el Diálogo Interreligioso de Barcelona como voluntaria y con el Centro de Estudios de las Tradiciones de Sabiduría como docente ayudante en dos cursos sobre los fundamentos del Islam.